El impacto de la pandemia actual ha provocado en el turismo una crisis sin precedente en la historia del sector.
Hablando específicamente de la Unión Europea recordemos que es la región con mayor cantidad de llegadas internacionales, concentrando el 40% a nivel mundial.
Según la OMT durante el año 2018 llegaron a Europa 710 millones de viajeros, generando ingresos por 570.000 millones de dólares y además el Viejo Continente genera uno de cada dos viajes que se realizan en el mundo; siendo un importante mercado emisor.
Resaltemos la gran extensión del tejido empresarial turístico, no solamente involucra a las empresas netamente turísticas sino también a otros sectores dependientes de la actividad que están sufriendo el efecto arrastre; como lo son el sector del transporte y la restauración entre otros.
Dentro de la UE hay ciertos países que cuentan con una mayor dependencia económica del turismo. Esto constituye uno de múltiples motivos que podemos encontrar de porque hay economías que están sufriendo más que otras los efectos colaterales de esta crisis.
En España el turismo es una de las principales actividades económicas y las fuertes restricciones de desplazamiento junto al cierre de fronteras han ocasionado un gran daño a la economía del país.
Según estimaciones del Consejo Europeo el impacto en el turismo ha sido el siguiente:
📌Destrucción de 6 millones de puestos de trabajo.
📌Reducción en un 60%-90% del nivel de reservas respecto del 2019.
📌Pérdidas del 85% en el nivel de ingresos.
Frente a este panorama…
¿Qué medidas tomará la Unión Europea reactivar el turismo?
El objetivo principal es inyectar liquidez 💰 en el sector por lo que se prevén las siguientes medidas:
📌Alivios fiscales de hasta 100 billones de euros para preservar los empleos.
📌Prestamos a tasas bajas para las empresas turísticas.
📌Reembolsos: Permitir a las empresas entregar vouchers en lugar de dinero.
En mi opinión dada la importancia económica y social que el turismo posee en Europa estas medidas necesitan el apoyo y coordinación activa por parte de los diferentes Estados europeos ya que son los responsables de instrumentar estas ayudas de Bruselas.
En el caso de España es necesario una mayor cantidad de acciones concretas que vayan en la misma línea de la UE; medidas que inyecten liquidez en el sector para poder retomar la actividad una vez finalizada esta etapa de prohibiciones y restricciones que hacen casi imposible trabajar con un mínimo de normalidad.
Es imprescindible una mayor coparticipación activa del Estado junto al sector privado; es necesario preparar a los actores turísticos para la nueva realidad que nos enfrentaremos siendo esencial acelerar la digitalización del modelo turístico.